¡Buenas tardes a tod@s! Hoy estamos súper contentos… tras la resaca fallera, nos adentramos en la primavera, una estación del año que nos encanta y lo hacemos, encima, con la celebración del Día Mundial de la Felicidad. Una excusa perfecta para desearos muchísima ilusión, diversión y vida. ¡Feliz día a todos nuestros seguidores! Aprovechamos la nueva entrada de blog que publicamos hoy para daros unos buenos consejos sobre la limpieza de los fregaderos. Como sabéis la mayor parte de las actividades que realizamos en la cocina incluyen el paso por el fregadero… ¿Sabes toda la suciedad que queda acumulado en esta zona?
La verdad es que la mala higiene afecta muchas veces al bienestar de toda la familia que vive en casa, ya que se acumulan bacterias y gérmenes que pueden causar enfermedades. Algunos modelos de fregaderos están diseñados para facilitar la limpieza, quizás tienen esquinas redondeadas o superficies lisas que no permiten que la suciedad se junte allí.
El material del fregadero es otra cuestión que debe tenerse muy en cuenta si queremos mantenerlo limpio. Por ejemplo, los fregaderos de acero inoxidable, que son unos de los más utilizados en la mayoría de las casas, son ideales para la cocina porque este metal no tiene poros y puede ser limpiado con cualquier detergente o jabón. En lo único que debemos de tener cuidado es con el tipo de esponjas que utilizamos para limpiarlo, recordad que el acero inoxidable puede rayarle por lo que las esponjas de espuma o goma serían, en este caso, la mejor opción.
Por otro lado, tenemos los fregaderos de porcelana también muy demandados por ser unos de los más clásicos y por su imagen tradicional. Este tipo de material es mucho más vulnerable a las manchas y a las rayas, por lo que para limpiarlo necesitaremos de una esponja suave y cloro. Deberemos limpiarlo a diario para evitar que se manchen, pero si tiene alguna mancha que es difícil de quitar tenemos que dejar actual el cloro por lo menos 30 minutos y, posteriormente, refregar fuerte con la esponja de goma.
Otra cuestión importante es que, además, de mantener nuestros fregaderos impecables, debemos de mantener correctamente limpias nuestras griferías. Recordad que vuestras manos están en contacto con ellas cada vez que queremos abrir la llave que permite el paso del agua. Su forma de limpieza depende, también, del material con el que estén fabricadas, aunque también las más comunes siguen siendo las de acero inoxidable y porcelana.
